El mecanismo de minoración ignora la realidad: la energía ya ha sido vendida por las comercializadoras y adquirida por clientes a precios fijos inferiores al precio del mercado diario

Si se aplicara la minoración, se daría la paradoja que esta sería hasta mayor que el precio que están recibiendo de sus clientes, llegándose al absurdo de tener ingresos netos negativos

Madrid, 21 de septiembre de 2021.- Tras las medidas aprobadas por el Consejo de Ministros el pasado martes, 14 de septiembre, aelēc, Asociación de Empresas de Energía Eléctrica, cree importante aclarar algunas cuestiones que afectan de manera directa e injustificada a las compañías eléctricas a las que representa. 

En relación a la medida de la minoración de la retribución de las centrales no emisoras por el precio del gas (hidráulicas y nucleares y eólicas y fotovoltaicas sin primas), ésta se basa en la suposición de que estas centrales de generación están vendiendo su energía al precio del mercado diario, por lo que se estarían beneficiando de la escalada de precios actual.

Sin embargo, la realidad es que esta energía ha sido vendida por las comercializadoras y adquirida por los clientes que han contratado a un precio fijo, por lo que este precio – inferior al que marca el mercado mayorista diario en la actualidad – es el que reciben las centrales. Estos contratos se han venido formalizando a precios sustancialmente inferiores a los precios actuales del mercado diario, por lo que no tiene sentido aplicarles una minoración justificada por unos ingresos supuestos que no reciben. Estos contratos se vienen firmando a través de las distintas opciones existentes y que no es la de vender directamente la energía en el mercado mayorista al precio resultante en el mismo, una práctica que realizan los generadores y comercializadores de nuestro país al igual que sucede en el resto de países europeos. De esta forma los comercializadores pueden garantizar precios fijos a sus clientes [ver ejemplo abajo].

El hecho de que todas las centrales de generación deban ofertar su energía en el mercado mayorista diario tiene su origen en lograr un despacho óptimo, es decir, que en cada momento funcionen las centrales más eficientes. Sin embargo, este precio es irrelevante para las empresas eléctricas ya que el importe que reciben del mercado diario por vender la energía de sus centrales es igual al que pagan por recomprarla para cumplir con los compromisos adquiridos con sus clientes.

En definitiva, la fórmula de minoración de ingresos afecta a la energía producida por unas centrales, que ha sido adquirida por los clientes que han firmado contratos en mercado libre a precio fijo, bajo el supuesto de que reciben los precios actuales del mercado diario. Un hecho que no está sucediendo.

Tal y como vienen comunicando trimestralmente a la CNMV, las empresas eléctricas tienen vendida a plazo el 100% de su producción de base (nuclear y renovable) de 2021 y un porcentaje superior al 75% de la de 2022 desde hace meses, a unos precios muy inferiores a los precios actuales del mercado diario.

Si se aplicara la minoración, se daría la paradoja que esta sería hasta mayor que el precio que están recibiendo de sus clientes, llegándose al absurdo de tener ingresos netos negativos.

En definitiva, la aplicación de esta medida aprobada por el Gobierno el pasado miércoles a través del Real Decreto-ley 17/2021, no está justificada al distar de la realidad de lo que sucede en el mercado de electricidad.

Ejemplo tipo:

Por ejemplo, si tomamos como referencia los precios del mercado a 16 de septiembre, de 188,18 €/MWh, de acuerdo con la fórmula de minoración propuesta, cada central verá reducidos sus ingresos en 81,1 €/MWh por cada megavatio producido. Pero, si esas centrales tienen su producción vendida, por ejemplo, a un precio de 60 €/MWh, incurrirán en unas pérdidas de -21,1 €/MWh, una situación económicamente absurda e insostenible.