La ambiciosa transición energética que necesita España precisa de actuaciones importantes en las redes de distribución eléctrica.

Las empresas presentarán sus observaciones a las propuestas publicadas hoy por la CNMC.

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha hecho públicas sus propuestas de circular relativas a la tasa de retribución y a la nueva metodología retributiva para el segundo periodo regulatorio entre 2020 y 2025. El plazo para presentar observaciones está abierto hasta el próximo 9 de agosto.

La aportación de las redes eléctricas de distribución es crucial para integrar el volumen de proyectos renovables previsto, hacer posible el autoconsumo y permitir el desarrollo de las infraestructuras de recarga del vehículo eléctrico, como ejemplos más evidentes, pero no únicos, del cambio de paradigma que tiene que abordar el sistema eléctrico en su totalidad. Es por la vía de la electrificación de la economía como se podrán alcanzar los compromisos de descarbonización que, como país, nos hemos fijado para 2030. Así lo corrobora el propio borrador del Plan Nacional de Energía y Clima (PNIEC), que cifra las inversiones en redes y electrificación en 41.846 millones de euros.

La distribución eléctrica es una actividad intensiva en capital y con largos periodos de recuperación de las inversiones. Por tanto, realizar las inversiones necesarias para cumplir con los objetivos del PNIEC requiere que no se reduzca el nivel retributivo actual, y contar con una tasa financiera de retribución razonable.

Sin embargo, y a falta de cuantificar otros aspectos cuyo impacto se va a analizar, la Asociación de Empresas de Energía Eléctrica, aelēc, observa que la tasa de retribución definida experimenta una bajada significativa, situándose en el 5,58% antes de impuestos, lo que resulta insuficiente y no concuerda con la contribución que las redes de distribución eléctrica tienen que hacer para el cumplimiento de los objetivos del PNIEC.

Por ello, durante este proceso para presentar observaciones que ahora se abre, ofrecemos toda nuestra colaboración y confiamos en que se tomen en consideración los argumentos anteriormente referidos para que pueda llevarse a cabo la inversión necesaria con la que avanzar en la transición energética.