El sector eléctrico comenzó 2019 con un importante cambio normativo que ha marcado, en gran medida, el año regulatorio. Cumpliendo con lo marcado desde Bruselas, el 12 de enero se publicaba el Real Decreto Ley 1/2019, que transpone el contenido relativo a las actividades reguladas nacionales de dos Directivas europeas (Directiva 2009/72/CE y la Directiva 2009/73/CE) a la legislación española. Estas directivas establecen que, “para un adecuado funcionamiento de los mercados interiores de la electricidad y del gas natural, los reguladores de la energía deben poder tomar decisiones sobre todas las cuestiones de reglamentación pertinentes y que sean totalmente independientes de cualquier otro interés público o privado”.

Así, desde enero de este año, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) asumió nuevas competencias “para adecuar(se) a las exigencias derivadas del derecho comunitario (…), sobre normas comunes para el mercado interior de la electricidad y del gas natural”. Este nuevo reparto de competencias entre el Gobierno y la CNMC ha marcado la actividad de este organismo durante 2019.

Pero esta no es la única novedad que aporta esta nueva norma. El Real Decreto Ley 1/2019 incorpora el mecanismo de relación entre los objetivos de política energética, que corresponden al Gobierno, y competencias del regulador, que puede dar lugar a la convocatoria de la Comisión de Cooperación, correspondiendo la última palabra a la CNMC.

Circulares de la CNMC

Las competencias de la CNMC se han materializado en la apertura de varios procesos de consulta pública necesarios para la aprobación de las diferentes circulares. Las que afectan a las redes de distribución eléctrica son cuatro:

  • Circular sobre la metodología y condiciones del acceso y de la conexión a las redes de transporte y distribución de las instalaciones de producción de energía eléctrica, que tiene por objeto regular los procedimientos, plazos y criterios para la evaluación de la capacidad de acceso y el otorgamiento de los permisos.
  • Circular que establece la metodología para el cálculo de la retribución de la actividad de distribución, cuyo objeto es establecer la metodología para determinar la cuantía a retribuir a las empresas distribuidoras, incentivando la mejora de la calidad de suministro y la reducción de las pérdidas en las redes y al mínimo coste para el sistema.
  • Circular que establece la metodología de cálculo de la tasa de retribución financiera de las actividades de redes para el segundo periodo regulatorio, así como los valores que resultan de la aplicación de dicha metodología. La Circular propone, como metodología de cálculo la que se basa en el cálculo del Coste Medio Ponderado de Capital (WACC, por sus iniciales en inglés), que es el método más utilizado entre los reguladores europeos para el cálculo de la tasa de retribución de las actividades reguladas del sector eléctrico y gasista.
  • Circular que establece la metodología para el cálculo de los peajes de transporte y distribución de electricidad, que desarrolla una metodología para calcular el reparto de la retribución reconocida a las redes entre distintos consumidores, según el nivel de tensión al que estén conectados y su discriminación horaria. La aprobación de una metodología de peajes no es un ejercicio aislado, sino que forma parte de las tarifas de acceso que se completan con la metodología de cargos que debe fijar el Gobierno y que está todavía pendiente.

El Marco Estratégico de Energía y Clima

Por su parte, el Gobierno, a través del Ministerio para la Transición Ecológica, sometió a consulta pública, en febrero de este año, tres documentos que integran el Marco Estratégico de Energía y Clima. Este Marco quiere constituir el pilar fundamental de la política energética del Gobierno durante los próximos años y recoger la transposición a la legislación española de los compromisos de la Unión Europea en la lucha contra el cambio climático. En concreto, estos tres documentos son:

  • El Anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, como herramienta institucional para facilitar la progresiva adecuación de nuestra realidad económica a las exigencias de la acción climática que marca la UE. En junio, se presentó una nueva versión. Sin embargo, la convocatoria de elecciones generales en noviembre de 2019 ha hecho decaer este anteproyecto.
  • El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030, que define el marco de planificación estratégica nacional que refleja la contribución de España a la consecución de los objetivos establecidos por la Unión Europea (UE). El texto definitivo de este documento programático, cuyo primer borrador fue valorado positivamente por la Comisión Europea, debe enviarse a Bruselas antes del fin de año. Su ambiciosa propuesta para 2030 contempla la reducción de emisiones en un 21% con respecto a 1990, el objetivo de energías renovables hasta un 42% del consumo final de energía (lo que implica el 74% de la generación eléctrica en 2030) y un objetivo de eficiencia energética en un 39,6%.
  • Y la Estrategia de Transición Justa, con los instrumentos necesarios para optimizar las oportunidades de empleo de la transición a través de marcos de formación profesional, políticas activas de empleo y planes de reactivación de los territorios afectados.

Real Decreto de Autoconsumo

La primavera de este año estuvo marcada por otra norma, el desarrollo reglamentario del RDL 15/2018 mediante el Real Decreto 244/2019, por el que se regulan las condiciones administrativas, técnicas y económicas del autoconsumo de energía eléctrica y que, define este como el consumo por parte de uno o varios consumidores de energía eléctrica proveniente de instalaciones de generación próximas a las de consumo y asociadas a las mismas. En este texto, se facilita el desarrollo del autoconsumo en nuestro país, simplificando los trámites para los consumidores, productores y la sociedad en su conjunto.

La Regulación esperada para 2020

La ola de cambios que ha comenzado en 2019 se mantiene para el próximo año. La CNMC tendrá que continuar con las iniciativas en curso. Hasta la fecha, sólo se ha publicado una de las cuatro circulares: la de la tasa de retribución financiera, y está previsto que se publique antes del fin de 2019 la de la retribución de la actividad de distribución, que ya ha pasado por el Consejo de Estado. Sin embargo, aunque la circular de metodología de peajes ya se está tramitando ante este órgano consultivo, lo cierto es que resulta incompleta, en cuanto a las señales de precio que recibirán los consumidores, sin la metodología de cargos que corresponde aprobar al Gobierno.

Ante la situación transitoria actual, en la que tanto la circular de peajes como la normativa de cargos no se prevé que vayan a ser aprobados antes de final de año, el Gobierno ha decidido prorrogar los peajes del 2019 para el 2020. Por tanto, en 2020 se esperan la publicación de la circular de peajes y el RD de metodología de cargos.

Asimismo, la circular de acceso y conexión, fundamental para la integración de renovables también se aprobará el año que viene junto con el desarrollo reglamentario que corresponde al Gobierno.

Pero es el nuevo Gobierno, aún por constituirse, el que tendrá que afrontar un importante reto legislativo en 2020. Está pendiente la aprobación de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que enunciará y desarrollará los principios básicos del proceso de descarbonización. También entrará la aplicación del PNIEC en el año 2020 y deberá desarrollar la Estrategia de Transición Justa.

Publicado en: Energética