Valoración de aelēc sobre las medidas adoptadas en Consejo de Ministros en relación al precio de la electricidad

Madrid, 14 de septiembre de 2021.- aelēc, Asociación de Empresas de Energía Eléctrica, manifiesta su contundente rechazo a las medidas anunciadas en el último Consejo de Ministros dirigidas contra las compañías eléctricas.

La asociación insta al Gobierno a buscar soluciones verdaderamente eficaces, que protejan de la volatilidad diaria de precios a los consumidores con tarifa regulada (un tercio del total), y que no penalicen de forma injusta a un sector absolutamente comprometido con la electrificación y descarbonización de la sociedad, el desarrollo territorial y el empleo, así como la protección de los colectivos vulnerables.

El sector eléctrico está asumiendo grandísimos esfuerzos económicos, tanto por la vía de los impuestos, que superan los 3.300 millones de euros anuales, como por la de las inversiones, con un compromiso que supera los 4.500 millones de euros este año. Todos fundamentales para que nuestro país cuente con un suministro de calidad incluso en los escenarios más adversos.

A falta de conocer el texto del Real Decreto-ley, a juicio de la asociación, el recorte a los ingresos de la generación hidráulica y nuclear, justificado en un supuesto incremento de los beneficios por la subida del precio del gas, es una medida injusta y desacertada. Tiene un enorme impacto en la estabilidad de un sector que ni es responsable de esta situación ni se está beneficiando de ella, algo que puede comprobarse observando el valor en bolsa de las empresas a pesar del encarecimiento de los precios a lo largo de 2021.

Tal y como vienen comunicando trimestralmente a la CNMV, las empresas eléctricas tienen vendida a plazo el 100% de su producción de base (hidráulica, nuclear y renovable) de 2021 y un porcentaje superior al 75% de la de 2022 desde hace meses, a unos precios muy inferiores a los del mercado spot. Con estas ventas a plazo se han ido formalizando las ventas a precio fijo de los clientes en mercado libre. Ahora se les va a imponer una reducción de ingresos de unos 65 €/MWh, que se suman a la minoración de los ingresos derivados de la subida de precios del CO2 (ahora en fase de Proyecto de Ley tramitándose en el Congreso de los Diputados) del entorno de otros 10 €/MWh. Como se puede comprobar, ni las empresas eléctricas se están beneficiando de los precios actuales del pool, ni los ingresos cerrados por las tecnologías hidráulica, nuclear y otra renovable permiten minoraciones de ingresos como los previstos por este Real Decreto-ley y por el Proyecto de Ley de minoración de CO2.

Respecto a la obligación de subastar energía, también recogido en el anunciado Real Decreto-ley, ya se introdujo en 2007, y el resultado fue una mera transferencia de rentas a determinados intermediarios. Ya pudimos comprobar que esta medida no sirve para bajar los precios ni beneficia a los consumidores de ninguna forma.

Las compañías eléctricas asociadas a aelēc expresan una vez más que, al igual que el conjunto de los ciudadanos, empresas y administraciones, sigue con preocupación la progresiva escalada de precios de gas, que es la causa de la subida del precio mayorista de electricidad.

Este incremento no hace sino encarecer el coste de suministrar a sus clientes con los que tiene compromisos de venta por un volumen de energía superior a la producción propia y, en gran medida, con precios fijos. A este respecto, hay que recordar las ofertas comerciales dirigidas a clientes domésticos, que ofrecen precios fijos durante plazos de hasta varios años, blindando a estos clientes de la volatilidad del pool y logrando un recibo de la luz estable.

La solución pasa por una reforma de la tarifa regulada que evite -como sucede en países europeos de nuestro entorno- el traslado a los consumidores de la volatilidad del mercado.

El otro ámbito de actuación para reducir el precio de la luz deber ir orientado a limpiar la factura de la luz de todos aquellos componentes que nada tienen que ver con la producción eléctrica y su transporte y distribución transporte y acometer una reforma fiscal que alivie la presión a la que está sometida el recibo de la luz con altos impuestos.

Las medidas dirigidas a intervenir los mercados van en contra de su eficiencia, la ortodoxia europea y crea un clima de inseguridad jurídica. Tampoco resulta de utilidad tomar en consideración una supuesta sobreretribución de tecnologías, que no están amortizadas, son claves para la transición energética y, en muchos casos, operan en pérdidas desde hace años.

Por último, desde aelēc se sigue haciendo hincapié en que cuanto más avancemos en la electrificación de la sociedad a través de tecnologías de generación con renovables, como la hidráulica, la eólica y la fotovoltaica, más rápido iniciaremos el camino hacia un precio de la energía barato y asequible para todos los consumidores.

El sector seguirá comprometido y trabajando para que, dentro de su limitado margen de actuación, los consumidores dispongan de un servicio de energía eléctrica estable y a precios asequibles.